Vocación.
Me encabrona, ver campesinos pidiendo dinero en la calle, además de ancianos, no por que me moleste su presencia, mas bien por que su presencia no tendría razón de ser si las cosas fueran distintas.
Me conmueve demasiado ver viejitos en la calle que venden ajos, o marchantas que ya no deberían preocuparse, cargando cubetas y fardos demasiado pesados para sus pobres huesos.
Una de las razones por las que estudio mi carrera es por ayudar a esa gente, se que nunca podre dejar de ver a esas personas sin proponerme ser mejor cada día.
Hoy llego un señor a la casa pidiendo dinero, o comida, o ropa vieja, encima de todo nos vendía una cobija que traía puesta, tal vez lo único que poseía para combatir el frio, y lo único que pedía era lo que yo quisiera darle. Obviamente soy muy mierda, pero no tanto como para aprovecharme de el. Le di todo el dinero que traía en la bolsa, (como 20 pesos).
Se que tal vez esas personas a las que intento ayudar en la calle nunca sean beneficiarias del esfuerzo de mis años de estudio, pero cada que veo alguna de ellas en la calle, levanto un puño al cielo y amenazo a Dios con maldiciones terribles, esperando me ayude a cumplir mi propósito. No soy un santo, ni busco inmolarme de esta manera, obviamente espero obtener un beneficio de lo que voy a hacer. Pero el que quiera obtener este beneficio no me exime de cambiar al mundo, al campo, para bien.
Ojalá tus sueños no se pierdan en el camino, cuando veas que estás solo entre tantos solos que quieren cambiar el mundo.
ResponderBorrarmis pasos ya se perdieron una vez, pero la soledad los guia de nuevo, en mi carrera soy un Dios, es en corazon donde soy un idiota...
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