Desbalances.

 

Hoy fue un día demasiado raro, agridulce, cuando no tenia que ser así, tendría que haber sido un día normal, tal vez un poco mas alegre de lo común, pero normal en términos generales.

Sin embargo, en cuanto empiezo a salirme de curso, y me distraigo en asuntos por los cuales en primer lugar yo no estaba preocupado, la vida me da una sacudida, fuerte como siempre, en acciones y palabras, en regaños y malos ratos.

Hoy herí a alguien que quiero, y por mas que pido disculpas se que no hay como remediar mi error, pero si algo he aprendido es que yo solo respondo a la fuerza, es por eso que las cosas en mi vida pasan así, de golpe, pues es la única manera en que yo puedo reaccionar.

Hoy, tomare la lección de ayer, y  no intentare forzar aquello que no debo, pues lo que deba ser será. Se que mis problemas los genero yo mismo, y mis soluciones también, y se también que no puedo desviarme ni un centímetro del Camino, ni perder de vista mi horizonte, ya que el Universo se ha vuelto esplendido en bendiciones, pero mas estricto aun sobre las reglas del Combate, se que ya no hay tiempo para desistir, y que todo aquello que sea superfluo debe ser dejado de lado.

Hoy solo puedo decirle al viento que lo siento, se que mis palabras e intención de alguna manera llegaran a quien deban llegar. Se que no puedo quejarme de la dureza del castigo, pues mi error esta en cometer errores, para los cuales ya no hay cabida. Hoy Adri me hizo reflexionar, y darme cuenta de mi propia ceguera, pues uno no puede ser su propio medico.

Hoy dejo atrás aquello que intente forzar, todo lo que es para mi, a mi llegara. Cierto, dichoso, inconmensurable, interminable.