Regreso hoy, Victorioso!

Con paso vacilante, cansada, vuelvo. El sudor empapa mis ropas, mi espada mellada y tinta en sangre de corazon, mi escudo abollado y la armadura sucia y sin lustre.

He vuelto, Victorioso, pero apenas vivo. Y aqui, a la entrada de mi tienda, me hinco y me descubro. Y desde lo mas profundo de mi corazon brota una oracion dicha por mis resecos labios.

¡Hoy he vencido Señor!, ¡ Luche con arrojo y valentia!, ¡Luche con Amor y sin miedo!, ¡Mi espada no titubeo, y mi escudo me fue fiel!, ¡Pero al final, no venci por mi espada Señor, pues fue mi Corazon quien guio el Combate!, ¡Mas sin embargo, se Señor, que no hubiera vencido sin tu guia, y asi al final de esta lucha, me postro ante ti a agradecer!.

¡Hoy es un dia de regocijo Señor, asi que festejo ante ti y te ofrezco un Dia del Perdon!

¡Yo te perdono a ti, por haceme sufrir con tan duras pruebas, te perdono por quitarme tanto y por dejarme solo, pero mas te perdono por no acudir a mi cuando Yo me encontraba desamparado y desnudo! ¡Por todo esto Señor Yo te Perdono!.

¡Mas tu perdoname a mi Señor, por dudar de ti, por ser sordo a la voz del Angel que pones en boca de mi amigo, perdoname Señor por dejar mi Camino,pero sobre todo, por ser un Guerrero de la Luz, y no creer que soy un Guerrero de la Luz!.

Asi que Señor, hoy vengo ante ti a agradecer la Victoria. Y a decirte:¡ Tu me perdonas, Yo te perdono, estamos en Paz!

Comentarios